Antisemitismo

El término antisemitismo se utiliza para describir los sentimientos de prejuicio y desprecio hacia los judíos y el Judaísmo. Cubre una extensa gama de concepciones negativas que van desde los estereotipos hasta el odio racial tradicional. Los sentimientos de hostilidad hacia los judíos se dan también en países sin población judía y entre personas que nunca han conocido a judíos. Hasta el siglo XIX, el antisemitismo existió fundamentalmente como un fenómeno cultural y religioso. La persecución de los judios se limitaba por regla general a restringir su movilidad social y económica. Hacia finales del siglo XIX, el concepto tradicional de antijudaísmo se complementó con la noción de que los judíos pertenecían a una “raza” completamente distinta. Así, los judíos llegaron a ser percibidos como un elemento extraño en medio de una sociedad étnicamente homogénea, que amenazaba los mismísimos cimientos del Estado-nación.

En el siglo XX se agregó al antisemistismo el racismo biológico. Los prejuicios contra los judíos se presentaban ahora haciendo referencia a una teoría supuestamente científica. Anteriormente, muchos habían creído posible aceptar como conciudadanos a los judíos, a condición de que estuvieran dispuestos a asimilarse y convertirse al Cristianismo. Las nuevas teorías, en cambio, afirmaban que los judíos poseían rasgos innatos que hacen de ellos una "raza extraña", incapaz de ser integrada. Los teóricos raciales contemplaban al “judío” en oposición al “ario” o “alemán” y a la vez, también, como perteneciente a la más peligrosa de todas las “razas”.